Comienza por elegir el color de las paredes, deja que tu hijo escoja el tono de su preferencia, siempre aconsejándole que se mantenga dentro de los colores primarios o sus combinaciones. Los más recomendados para chicas jóvenes son el violeta, el fucsia y verde palta.
Los chicos querrán resaltar su hombría con un color tal vez oscuro como el verde o el azul. De igual forma sugiere los neutros que combinados con papel pintado a rayas o círculos de colores vivos como el naranja o amarillo generan una atmósfera núbil y alegre. Luego permite que den el toque final a las paredes con cuadros o pósters de su grupo de música o artista favorito, de un equipo de futbol o figuras geométricas. Y aquí vale interpelar a favor de utilizar los pósters que durante mucho tiempo fueron considerados un arte menor, tal vez por su perfil puramente comercial, o por sus orígenes inciertos, pero que sin embargo a través de los años, han logrado imponerse en la preferencia de un público más amplio que el juvenil.
En tiendas especializadas puedes obtener reproducciones de obras de arte famosas, diseños vanguardistas y hasta arte abstracto en formato de póster. Una de sus principales ventajas es el bajo costo, pero además pueden aportar estilo y personalidad a ambientes particulares de la casa. Una pared que contenga pósters de películas famosas, láminas con mensajes pacifistas, íconos de la moda, son algunas de las opciones para quienes buscan dotar de originalidad a la decoración hogareña; además en motivos juveniles las opciones son infinitas y sus destinatarios adoran estar rodeados por sus ídolos o sus imágenes preferidas.
Así que si tu presupuesto es limitado, o si buscas vanguardia y estilo personal, los posters son una opción que puedes considerar sin temor a equivocarte. Una habitación juvenil debe estar ordenada. Los chicos de esa edad suelen pasar por una etapa de desorden que a veces es difícil de controlar, por eso es importante que preveas una zona cómoda de estudio que permanezca en buenas condiciones de limpieza.
Utiliza muebles organizadores y repisas para aprovechar mejor el espacio y ten en cuenta que para muchos púberes, el dormitorio ideal incluye muebles y elementos decorativos semejantes a los de un apartamento o estudio de modo que no descartes la posibilidad de colocar un sofá o un baúl de guardado con asientos para relajarse con los amigos.
Actualmente podemos recurrir a una cantidad indefinida de muebles complementarios y prácticos para las recámaras: mesas de noche, repisas, poltronas, cajoneras y más, que al incluirlos armonicen con el resto de la decoración, sobre todo en torno al armario principal de la habitación. Además los juguetes y carritos de carreras ya deben haber quedado en el olvido y aquellos estantes libres pueden utilizarse para accesorios más juveniles, como libros, equipo de música y computadora.
Respecto a la iluminación de la zona de estudio, es preciso comentar que en ella son muy útiles las lámparas puntuales bien sujetas con pinzas y brazos largos, de tipo flexo, con pequeñas y sencillas pantallas de aluminio o pintadas en color que domine o contraste el ambiente.
De preferencia ubica el escritorio cerca de una ventana para obtener los beneficios que provee la proximidad a una fuente de luz natural.
En el resto de la habitación recuerda mantener el color para resaltar el tema juvenil.
Lámparas con pantallas de colores son una buena opción que crean efectos contrastantes en relación a los otros colores que priman en el espacio. Los cojines de la cama también pueden utilizarse para este fin.
En general, recomendaciones pueden haber muchas, pero es necesario tener claro qué es lo que le gusta al chico ya que deben identificarse en pleno con su espacio, para ellos su habitación es privada, y es donde pasan la mayor parte del tiempo.
Los chicos querrán resaltar su hombría con un color tal vez oscuro como el verde o el azul. De igual forma sugiere los neutros que combinados con papel pintado a rayas o círculos de colores vivos como el naranja o amarillo generan una atmósfera núbil y alegre. Luego permite que den el toque final a las paredes con cuadros o pósters de su grupo de música o artista favorito, de un equipo de futbol o figuras geométricas. Y aquí vale interpelar a favor de utilizar los pósters que durante mucho tiempo fueron considerados un arte menor, tal vez por su perfil puramente comercial, o por sus orígenes inciertos, pero que sin embargo a través de los años, han logrado imponerse en la preferencia de un público más amplio que el juvenil.
En tiendas especializadas puedes obtener reproducciones de obras de arte famosas, diseños vanguardistas y hasta arte abstracto en formato de póster. Una de sus principales ventajas es el bajo costo, pero además pueden aportar estilo y personalidad a ambientes particulares de la casa. Una pared que contenga pósters de películas famosas, láminas con mensajes pacifistas, íconos de la moda, son algunas de las opciones para quienes buscan dotar de originalidad a la decoración hogareña; además en motivos juveniles las opciones son infinitas y sus destinatarios adoran estar rodeados por sus ídolos o sus imágenes preferidas.
Así que si tu presupuesto es limitado, o si buscas vanguardia y estilo personal, los posters son una opción que puedes considerar sin temor a equivocarte. Una habitación juvenil debe estar ordenada. Los chicos de esa edad suelen pasar por una etapa de desorden que a veces es difícil de controlar, por eso es importante que preveas una zona cómoda de estudio que permanezca en buenas condiciones de limpieza.
Utiliza muebles organizadores y repisas para aprovechar mejor el espacio y ten en cuenta que para muchos púberes, el dormitorio ideal incluye muebles y elementos decorativos semejantes a los de un apartamento o estudio de modo que no descartes la posibilidad de colocar un sofá o un baúl de guardado con asientos para relajarse con los amigos.
Actualmente podemos recurrir a una cantidad indefinida de muebles complementarios y prácticos para las recámaras: mesas de noche, repisas, poltronas, cajoneras y más, que al incluirlos armonicen con el resto de la decoración, sobre todo en torno al armario principal de la habitación. Además los juguetes y carritos de carreras ya deben haber quedado en el olvido y aquellos estantes libres pueden utilizarse para accesorios más juveniles, como libros, equipo de música y computadora.
Respecto a la iluminación de la zona de estudio, es preciso comentar que en ella son muy útiles las lámparas puntuales bien sujetas con pinzas y brazos largos, de tipo flexo, con pequeñas y sencillas pantallas de aluminio o pintadas en color que domine o contraste el ambiente.
De preferencia ubica el escritorio cerca de una ventana para obtener los beneficios que provee la proximidad a una fuente de luz natural.
En el resto de la habitación recuerda mantener el color para resaltar el tema juvenil.
Lámparas con pantallas de colores son una buena opción que crean efectos contrastantes en relación a los otros colores que priman en el espacio. Los cojines de la cama también pueden utilizarse para este fin.
En general, recomendaciones pueden haber muchas, pero es necesario tener claro qué es lo que le gusta al chico ya que deben identificarse en pleno con su espacio, para ellos su habitación es privada, y es donde pasan la mayor parte del tiempo.
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